viernes, 28 de mayo de 2010

Lágrimas en la lluvia...

... un muñeco de nieve en el desierto, palabras escritas con tiza, un cubito de hielo en una acera de Sevilla en el mes de Agosto... podríamos seguir buscando más metáforas tontorronas para definir la solidez que tienen las promesas que se lanzan "al aire" cada cierto tiempo cuando se habla del CAAC. Para muestra, un botón:

Comissió de Sostenibilitat, Mobilitat i Medi Ambient.
Barcelona, Sala Lluís Companys, 17 de Marzo de 2010.

Entre los temas a tratar ese día se encuentra una petición por parte del regidor de CiU sr. Joan Puigdollers, consistente en la creación un Consell de Participació Ciutadana en el CAAC, órgano de participación democrática abierto tanto a ciudadanos como entidades interesadas en colaborar en la gestión y toma de decisiones más significativas del centro. Se procede a votar entre los representantes de las diferentes fuerzas políticas presentes.

- La sra. Emma Balseiro (PP) vota favorablemente y declara que, "compartim l'objectiu de millorar les condicions del CAAC".

- El sr. Xavier Florensa (ERC) expone argumentos del tipo "com no podia ser d'una altra manera votarem a favor d'aquesta proposició", "veiem positiu que un equipament com és el CAAC, com d'altres equipaments que hi han a la ciutat que tenen els seus consells de seguiment que permeten poder anar debatent l'estat o les millores" y que "es pugui comptar amb els voluntaris, amb les entitats, etc…"

- El sr. Francesc Narváez (PSC) demuestra bastante poco interés por el tema y se limita a asentir.

- La Sra. Imma Mayol (ICV) también se muestra favorable en principio, pero parece ser incapaz de decir sí con claridad y se va por los cerros de Úbeda, después de manifestar que "nosaltres també estem d'acord" da comienzo a una larga divagación con un "jo només els hi volia comentar…" ... " altres equipaments que tenen consells d'aquestes característiques…eeehm.. i aleshores com que hi ha una certa experiència val la pena veure com ha anat i quina és la experiència i quins el resultats esta donant, no? i per tant a l'hora de fer la proposta en el Consell doncs els hi comentaré a vostés perque fem una proposta el màxim de consensuada possible" ... "tenim un comité de qualitat des de fa anys, tenim una comissió de seguiment, anem a intentar harmonitzar aquests organismes i per crear un consell semblant a una comissió de seguiment diguem-ne, perdó un consell, eh? ah... de de… que serveixi com espai de participació i que sigui el màxim possible…mmm …útil!… en base a la experiència que tenim..." (sic). Etc, etc, etc,... Bueno, al final suponemos que todos esos circunloquios pueden entenderse como un a la propuesta.

La promesa está hecha, con la unanimidad de TODAS las fuerzas políticas del Ajuntament de Barcelona (aunque alguna lo hiciera con la boca pequeña). Ahora falta ver cuándo y sobre todo cómo se estructura ese Consell, que haga honor a su nombre, sea realmente participativo y abierto a los ciudadanos y no se acabe convirtiendo en otra cortina de humo de cara a la galería, con la participación en grupo cerrado de los mismos de siempre y sin representatividad de quienes realmente se preocupan y conocen el CAAC en su día a día.

...
PD: Hablando de cortinas de humo y promesas incumplidas, resulta curioso que la sra. Mayol siempre haga referencia en sus intervenciones al Comité de Qualitat y a una presunta Comissió de Seguiment (¿existen?¿dónde están?¿qué hacen, si es que hacen algo?¿quienes las forman?), pero nunca hace referencia a la Comissió de Millores que está supuestamente llevando adelante un proyecto de obras de mejora en el CAAC y creando los nuevos protocolos, que incluyen el del Voluntariado. ¿Está mal informada? ¿Tiene mala memoria? ¿Será cierto que en realidad no es una "comisión" sino un "grupo de trabajo" como ha afirmado alguna persona de Medi Ambient y por tanto sus decisiones no son vinculantes sino que todavía deben ser aprobadas por otros (lo que supone todavía más retrasos y pérdida de tiempo)? ¿O será que ni la misma Imma Mayol acaba de creerse ya nada?

lunes, 24 de mayo de 2010

Fallo Técnico

Una de las principales preocupaciones de las personas voluntarias en el CAAC es conseguir que los perros y gatos tengan una estancia lo menos desagradable posible mientras llega la ansiada adopción. En el caso de los perros, eso pasa por conseguir que todos puedan salir a pasear 20/25 minutos fuera de sus jaulas cada día. Entre semana es bastante complicado, dado que el número de voluntarios es escaso (a pesar de que se nos intente vender otra realidad) y los paseos ven reducido su tiempo a pesar del redoblado esfuerzo que hacen las personas que suben entre semana. Hasta ahora parecía existir un pequeño "oasis" los fines de semana, en que los perros podían salir de sus jaulas durante algo más de tiempo e incluso había opción a "repetir" o dedicar más tiempo a los animales (oasis bastante relativo, ya que algunas personas subiendo a las 11.30 y sacando una o dos jaulas ya se dan por satisfechas, se cuelgan medallas y son las primeras en anunciar luego a bombo y platillo que "han salido todos", obviando el hecho de que eso se consigue gracias al esfuerzo de otras personas que están dando el callo desde las 10h hasta las 14h).
En todo caso, se venía notando en las últimas semanas que ese oasis empezaba a dar síntomas de sequía, cada vez costaba más sacarlos a todos, se llegaba cada vez más justo, había que apretar más en los paseos para poder sacar más perros, ya no había tiempo para hacer paseos largos e incluso se llegaban a hacer paseos de 10 minutos, deprisa y corriendo para que por lo menos pudieran hacer sus necesidades fuera de la jaula y no tuvieran luego que convivir con su propios excrementos durante horas... Hasta que ha pasado lo que tenía que pasar, el domingo 24 de mayo quedaron 12 jaulas por salir. Algo impensable no hace mucho, ya que fue un domingo climatológicamente impecable y si precisamente existía algún problema los domingos era organizarse con tanta gente rondando por el CAAC sin orden ni concierto.
Cada cual puede interpretar este hecho como quiera, por nuestra parte entendemos que es otra demostración más del FRACASO ABSOLUTO del Programa del Voluntariat que desde hace aproximadamente un año se está intentando instaurar con más pena que gloria en el CAAC. El "responsable del Programa del Voluntariat" es incapaz de desarrollar la labor por la que está cobrando cerca de 27.000€ al año, no coordina ni organiza al voluntariado, no tiene ni idea de animales ni tampoco sabe tratar adecuadamente a las personas. Se escuda tras cifras fantasiosas y niega la realidad, es incapaz de captar, motivar y fidelizar a nuevos voluntarios, en lugar de solucionar los problemas existentes dedica más tiempo a buscarlos donde no los hay y a crear problemas nuevos, en vez de aportar mejoras concretas se entretiene en inventarse normas y protocolos que justifica con largas parrafadas carentes de sentido, critica a los voluntarios a sus espaldas dando muestras de una falta absoluta de ética y de responsabilidad profesional. No solo no defiende a los voluntarios cuando tienen algún problema sino que se esconde, adoptando el papel de víctima para justificar su inoperancia (todavía estamos esperando a que informe oficialmente al voluntariado de que existe la posibilidad de ser sancionado con 120€ por la Guardia Urbana si no se recogen los excrementos de los perros cuando de hecho ya hay un voluntario multado, mientras que para cualquier otro tema insignificante le falta tiempo para mandar mails a diestro y siniestro).
(¿Tanto cuesta incluir una frase tipo "no recogerlas puede suponer multas de 120€ por parte de la Guardia Urbana? ¿Para qué sirve un Tècnic del Voluntariat cuando no informa de algo tan vital?)

El fracaso que supone que no se puedan atender a todos los animales viene motivado por dos fallos gravísimos en aspectos fundamentales de la gestión del voluntariado.
- En primer lugar la organización: alguien con experiencia, capacidad y dedicación coordinaría adecuadamente a las personas, decidiendo qué jaulas tienen que salir y cómo, conociendo a los animales se sabe cuales pueden combinarse para evitar viajes innecesarios. Como el Tècnic habitualmente no está, ni se le espera, ni hace un horario definido, ni se preocupa, ese aspecto queda en manos de la buena voluntad, el esfuerzo y, también hay que decirlo, de la improvisación de aquellas personas que hayan podido subir al CAAC y que en medio del caos hacen lo que buenamente pueden.
- En segundo lugar, la captación de nuevas personas voluntarias está fallando estrepitosamente. Es matemática elemental: si somos pocos, tenemos más esfuerzo que asumir. Curiosamente el Tècnic del Voluntariat es víctima de sus propias cifras, que demuestran claramente un descenso de la afluencia del voluntariado.

Cifras Oficiales del Programa del Voluntariat:
- Diciembre 2009
Personas voluntarias: 727
Voluntarios activos: 392
- Enero 2010
Personas voluntarias: 758
Voluntarios activos: 156
- Febrero 2010
Personas voluntarias: 765
Voluntarios activos: 121
- Marzo 2010
Personas voluntarias: 794
Voluntarios activos: 125

¿Puede ser más absurdo el planteamiento? Mientras el número de personas "apuntadas" crece sin parar, el número de voluntarios activos (¿de qué narices sirve un voluntario inactivo?) sigue una clara tendencia a la baja en enero y febrero (con un pequeño repunte de 4 personas más en marzo). ¿Cómo se explica que hayan más personas dadas de alta y menos que acudan efectivamente?¿Cómo se pasa de 392 a 125 personas con tanta rapidez? Y no hay que olvidar que esas 125 son "virtuales", ya que si una persona viene una vez al mes y saca un perro, ya es considerada como "voluntario activo" en las estadísticas. Todos sabemos que las personas que acuden regularmente se pueden contar con los dedos de las manos.¿Por qué se desanima a las personas con ganas de formar parte del voluntariado? El trato humano recibido día a día, más allá de las falsas sonrisas iniciales y de una charla con mucha palabrería y poca utilidad deja mucho que desear.
Lo más preocupante no son los inconvenientes que todo esto provoca a las personas, sino que quienes acaban pagando las consecuencias de todo este desastre son los animales del CAAC, que no están siendo atendidos en las condiciones adecuadas. Si el Tècnic del Voluntariat tuviera algo de dignidad asumiría su fracaso, dimitiría y dejaría su puesto a alguna persona más capacitada, pero mucho nos tememos que vamos a tener que seguir aguantando su inoperancia y sus faltas de respeto durante algún tiempo más.
Por suerte no hay mal que 100 años dure...

sábado, 15 de mayo de 2010

¿"Animalismo" municipal? No vamos bien...

Existe un documento en el que se plantean los objetivos del Pla Estratègic d'Animals de Companyia:
http://w3.bcn.es/fitxers/premsa/091021plaanimalscompanyia.135.pdf
El documento en sí tiene miga y animamos a que cualquier persona preocupada por los animales de Barcelona lo lea y compare intenciones con realidad. Lo que nos ha dejado "de pasta de boniato" es el punto "Més de 120 anys de tradició animalística".
¿Qué entenderán desde el Ajuntament de BCN por animalismo o "tradición animalística"?
Veamos:
*"Els inicis en les polítiques municipals d’animals domèstics de l’Ajuntament de Barcelona es remunten a l’any 1888, quan es va crear l’Institut Municipal d’Higiene. Tant aquest organisme com el Laboratori Municipal (1887) donaven resposta als efectes que podien tenir determinades malalties transmissibles dels animals als humans: les zoonosis. La preocupació inicial d’aquests serveis –avui integrats dintre de l’Agència de Salut Pública de Barcelona- era la vigilància epidemiològica de la ràbia. L’any 1972 la gossera municipal de la carretera de l’Arrabassada assumeix la recollida d’animals abandonats, la majoria dels quals eren eutanasiats. A partir de 1979, any en què s’elimina la ràbia terrestre a la península, es manté la vigilància d’altres zoonosis, però passa a primer pla la problemàtica generada per gossos a la via pública: mossegades, excrements, paràsits intestinals, accidents de trànsit, etc. Als anys 90 s’ apunta a un canvi de tendència: es comença a fer palpable el creixement del nombre de llars que tenien animals de companyia i també creix a la ciutat la sensibilitat social respecte el destí dels animals abandonats. Així, l’any 1998 es crea el Consell Municipal de Convivència, Defensa i Protecció dels Animals, un òrgan de debat i treball participatiu conjunt entre l’administració i les entitats animalistes presents a la ciutat. Sota l’impuls d’aquest Consell, s’han dut a terme accions com la conversió de l’antiga Gossera Municipal en Centre d’Acollida d’Animals de Companyia (cosa que implica un canvi radical en la filosofia del servei); la supressió del sacrifici d’animals recollits al CAAC; l’aprovació de l’Ordenança sobre la protecció, la tinença i la venda d’animals; o la creació d’un servei d’ambulància veterinària per atendre animals ferits en la via pública, entre d’altres. El Consell ha estat, des dels seus inicis, òrgan impulsor de les actuacions en matèria animalística a la ciutat. L’octubre de 1998, d’altra banda, l’Ajuntament de Barcelona es converteix en el primer Ajuntament que proclama per unanimitat la Declaració Municipal per a la Defensa i els Drets dels Animals. D’aleshores ençà han tingut lloc diferents actuacions en l’àmbit de la protecció i foment dels animals. La dotació municipal del Pla Estratègic d’Animals de Companyia, que serà tutel·lat per l’Oficina de Protecció dels Animals de Barcelona creada el gener de 2009, obre un nou periode d’actuació per als propers anys."


No entraremos a debatir que significa ser animalista, pero parece claro que tiene poco que ver con las actuales políticas municipales (con exterminios masivos de palomas incluidos). Debe ser que animalista y animalístico son dos cosas muy diferentes. La larga tradición del Ayuntamiento de Barcelona en cuestiones relacionadas con animales de compañía se basa en conceptos tales como "higiene", "laboratorio", "salud pública", "epidemia", "rabia", "enfermedades", "zoonosis" (recordemos que en Collserola siguen existiendo actualmente carteles que identifican al CAAC como Centro de zoonosis), "eutanasia", "excrementos", "mordiscos", "parásitos", "accidentes"...

Esa es la línea de actuación desde 1888: 122 años de historia nefasta que parecen seguir pesando demasiado en ciertas actitudes que se empeñan en ver a los animales como una "cosa", una amenaza y un gasto de dinero en lugar de ponerse al día, comprender que son seres vivos y como tales tienen derechos y merecen dignidad.Una perrera municipal digna, bien planteada y bien gestionada no es una carga, sino una inversión de futuro, una oportunidad y un servicio público del que animales y ciudadanía pueden beneficiarse.

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*"Los inicios en las políticas municipales de animales domésticos del Ayuntamiento de Barcelona se remontan al año 1888, cuando se creó el Instituto Municipal de Higiene. Tanto este organismo como el Laboratorio Municipal (1887) daban respuesta a los efectos que podían tener determinadas enfermedades transmisibles de los animales a los humanos: las zoonosis. La preocupación inicial de estos servicios -hoy integrados dentro de la Agencia de Salud Pública de Barcelona- era la vigilancia epidemiológica de la rabia. El año 1972 la perrera municipal de la carretera de la Rabassada asume la recogida de animales abandonados, la mayoría de los cuales eran eutanasiados. A partir de 1979, año en que se elimina la rabia terrestre en la península, se mantiene la vigilancia de otras zoonosis, pero pasa a primer plano la problemática generada por perros en la vía pública: mordiscos, excrementos, parásitos intestinales, accidentes de tráfico, etc. En los años 90 se apunta un cambio de tendencia: se empieza a hacer palpable el crecimiento del número de hogares que tenían animales de compañía y también crece en la ciudad la sensibilidad social respeto el destino de los animales abandonados. Así, el año 1998 se crea el Consejo Municipal de Convivencia, Defensa y Protección de los Animales, un órgano de debate y trabajo participativo conjunto entre la administración y las entidades animalistas presentes a la ciudad. Bajo el impulso de este Consejo, se han llevado a término acciones como la conversión de la antigua Gossera Municipal Centro de Acogida de Animales de Compañía (cosa que implica un cambio radical en la filosofía del servicio); la supresión del sacrificio de animales recogidos al CAAC; la aprobación de la Ordenanza sobre la protección, la tenencia y la venta de animales; o la creación de un servicio de ambulancia veterinaria para atender animales heridos en la vía pública, entre otras. El Consejo ha sido, desde sus inicios, órgano impulsor de las actuaciones en materia animalística a la ciudad. En octubre de 1998, por otra parte, el Ayuntamiento de Barcelona se convierte en el primer Ayuntamiento que proclama por unanimidad la Declaración Municipal para la Defensa y los Derechos de los Animales. Desde entonces han tenido lugar diferentes actuaciones en el ámbito de la protección y fomento de los animales. La dotación municipal del Plan Estratégico de Animales de Compañía, que será tutelado por la Oficina de Protección de los Animales de Barcelona creada el enero de 2009, abre un nuevo periodo de actuación para los próximos años."

jueves, 13 de mayo de 2010

Dudas razonables (II)

Aunque no somos grandes expertos ni arquitectos, parece que en el fondo tampoco decimos tantos disparates (o si los decimos por lo menos lo hacemos gratis, y no cobrando un sueldo que sale los bolsillos de los ciudadanos).
En un post anterior nos entretuvimos en comentar algunos aspectos poco claros de las hipotéticas obras de mejora que "antes del verano" ("en breu" según declaraciones de Sonia Frias, Directora d' Educació Ambiental de l'Ajuntament de BCN en COM Ràdio) está previsto que se hagan en el CAAC. El proyecto, surgido de una Comissió de Millores creada dentro del Consell de Convivència, Defensa i Protecció dels Animals lleva bastante retraso, ha sufrido cambios y 6 meses después... presenta un nuevo plano en el que ¡oh sorpresa! resulta que vuelve a aparecer la zona de gatos que en el proyecto original desaparecía (hasta que se vuelva a cambiar de idea, que también podría ser...).

Ahora el proyecto abandona la idea de hacer 67 jaulas y contempla la creación de 101, de las cuales 40 serían de 2,5 m2, por desgracia un tamaño bastante alejado de los 6m2 establecidos en el punto 2 del DECRET 6/1999, de 26 de gener, pel qual s'estableixen les condicions de manteniment dels animals de companyia para animales de más de 25 kg (aunque como ya comentamos en un post anterior, las perreras municipales están exentas de cumplir la ley en este punto). Se están tomando muestras del suelo del CAAC como paso previo a la realización de las obras, cuyo inicio los más incansablemente optimistas auguran para julio (¿en ese caso pararán en agosto para hacer vacaciones como hace medio país?).
Dejando de lado aspectos técnicos del proyecto sobre los que cada c
ual es libre de opinar (ya sabemos que las opiniones son como los culos: todo el mundo tiene, y en el caso del CAAC parece que algunas decisiones se tomen precisamente con esa parte de la anatomía), sigue sin quedar claro por una parte qué pasará con los animales mientras duren las obras ("realojar" 120 perros, algunos de ellos enfermos o con necesidad de cuidados especiales en otras protectoras no parece empresa fácil, especialmente porque las protectoras y refugios habitualmente saturados se saturan todavía más en verano por los abandonos), y por otra parte qué pasará con los trabajadores (si los animales no estarán en el CAAC, ¿se les dará vacaciones indefinidas hasta que finalicen las obras? ¿Irán temporalmente a trabajar a otras protectoras?¿Se les notificará que "no se requieren sus servicios hasta nueva orden"? ¿Se concentrarán todos los trabajadores exclusivamente en los gatos?(si es que no se hacen obras también en la zona de gatos...).
Sobre qué pasará con los voluntarios no nos atrevemos ni a preguntar, si no hay perros que pasear ¿se librarán de testigos incómodos durante una temporada? Claro, los gatos también necesitan atención y cuidados de las personas voluntarias pero el espacio en las jaulas de gatos es limitado... ¿tendremos que hacer turnos para poder entrar?
Se diría que quienes forman esta Comissió de Millores no conocen demasiado bien el CAAC, ni suben a pasear perros habitualmente, ni se enfrentan a los problemas cotidianos con que nos encontramos todos. El proyecto no parece que solucione uno de los problemas más habituales: cuando llueve (como hoy por ejemplo), los perros no salen de sus jaulas ni un minuto. No se contempla que los patios estén cubiertos, ni tampoco los pasillos de acceso a las jaulas, por lo que seguiremos igual que hasta ahora, a expensas de las inclemencias meteorológicas y con los animales encerrados varios días hasta nueva orden en cuanto empiece a llover.¿Tan difícil resulta prolongar unos metros los techos que cubren las jaulas y cubrir completamente por lo menos uno de los patios? El objetivo sigue siendo encerrar individualmente y aislar a los perros para que "molesten" lo menos posible, cuando en otras protectoras se están abordando con éxito otro tipo de actuaciones en espacios comunes que favorecen la socialización de los mismos. Tampoco sorprende demasiado: ya es tradición para este ayuntamiento que los animales y su bienestar sea siempre el último de los aspectos a tener en cuenta. No basta con reformar las instalaciones, hace falta además reformar y reciclar muchas mentalidades obsoletas.
Jaulas nuevas, problemas viejos...


Responsabilidades, irresponsabilidades


En los recientes episodios en los que se han visto involucrados (y perjudicados) algunos voluntarios ha sido desagradable comprobar de nuevo que quien cobra por "organizarlos" sin éxito, parece regocijarse con sus desgracias. Como mínimo no ha sabido o querido dar el apoyo necesario y se ha desentendido por completo a la hora de ofrecer cualquier ayuda a los/as afectados/as. Nada nuevo, cada vez está más claro que los voluntarios seguimos y seguiremos viniendo al CAAC porque nos preocupa profundamente el bienestar de los animales y nos apoyamos entre nosotros, no porque se nos de ninguna facilidad.
La Guardia Urbana con sus multas y la Sra. Durán con sus misivas castigan a personas voluntarias por lo que en realidad es responsabilidad del CAAC. Legítimamente, el Programa del Voluntariado es el referente último y debería responsabilizarse de lo que no hagan bien los voluntarios, como responsable civil subsidiario. Sin embargo, a cualquier persona voluntaria que sufra algún percance que requiera de atención médica sigue sin ofrecérsele ninguna mutua o centro hospitalario de referencia, cuando por Ley (y así lo refleja el Acuerdo de Colaboración que se firma entre voluntarios y ASPB) existe la obligación de contratar un seguro.
Lo que hacen bien algunas personas por iniciativa propia no suele importar si no es para que otro pueda atribuirse los méritos ajenos. Si la información relevante no circula (a pesar de que ese sea precisamente otro de los derechos recogidos en el Acuerdo de Colaboración), si los materiales son precarios, si la normativa se hace cenagosa y relativa, si no existe una formalidad en ninguna de las normas y todo se hace confuso, se castiga al último eslabón y mientras tanto se paga con dinero público a quien no cumple con su trabajo.
Falta de rigor en la confección del perfil laboral, falta de autoridad relacionada con inexperiencia e interés por solventarla, falta de coherencia en la cadena de mandos por la convivencia de departamentos distintos (ASPB y Medi Ambient), tendencia a desentenderse de las responsabilidades, animadversiones personales manifiestas poco profesionales y estrategias de intoxicación informativa muy poco edificantes. ¿Y de todo esto quien es el culpable? ¿Los voluntarios? ¿O "la Mayol", como el propio asalariado no se cansa de repetir? Otra cosa es: ¿A quien es más fácil culpar? ¿Quien está más indefenso? Pues eso…

¿Qué mensaje se manda a la ciudadanía cuando sabe que a los infractores de la seguridad vial se les "condena" a venir al CAAC?¿Subir al CAAC es un castigo?
¿Por eso no hay responsables, (en junio se cumplirán 6 meses sin director), ni los trabajadores están motivados ni con las garantías ni seguridad necesarias? ¿Tanto desprecian a los voluntarios que somos equiparables a algunos inconscientes que arriesgan su vida y la ajena con actitudes temerarias? ¿Es porque entre los que por allí andan hay personas cumpliendo sus deudas con la justicia que tratan a los voluntarios como delincuentes?


viernes, 7 de mayo de 2010

Para que no vuelva a pasar

Se cumplen en estos días 3 meses de la muerte en circunstancias muy poco claras del cachorro "Zeus" en el CAAC, y aprovechando la ocasión queremos recuperar unos artículos aparecidos hace un mes en prensa en los que diversas asociaciones denunciaban el mal estado de la perrera:

- Diario 20Minutos, el 7 de marzo (página 2)
link al PDF
- Diari El Punt, 8 de Marzo
Edición digital
Edición impresa

Esperamos que cada vez más y más asociaciones y ciudadanos hagan oír su voz y expresen su descontento con la actual situación del CAAC. La negación de la realidad y la huida hacia adelante del Ajuntament y la ASPB con falsos argumentos y todavía más falsas promesas no tiene futuro, y deja cada vez más en evidencia tanto a los responsables directos como a aquellos que por intereses personales o de "estrategia" prefieren mirar hacia otro lado, callan y se convierten en cómplices silenciosos de una situación injustificable.

jueves, 6 de mayo de 2010

Y siguen lloviendo multas a los voluntarios...

(La imagen refleja algo que no existe en el CAAC)


Increíble pero cierto: se multa a los voluntarios en el desarrollo de un trabajo altruista por el que no cobran un duro, por el que pagan en ocasiones comprando artilugios para los animales (correas, juguetes, bozales, cepillos, champús,...). Las cosas necesarias para poder ejercer de voluntarios y por las que el Ayuntamiento se ahorra una “pasta” en cuidadores por hacer, en parte, su trabajo. Y sin embargo, ironías de la vida, en lugar de intentar hacernos la vida un poco más fácil no se cansan de acosar. Se rumorea que la presión ejercida por los voluntarios hacia la Sra. Imma Mayol, 5ª Tinenta Alcalde del Ayuntamiento de Barcelona para que cumpla con sus falsas promesas -hechas en diciembre y publicadas por La Vanguardia por el Sr. Lluís Sierra y las cuales aún retumban en nuestros oídos- le ha hecho cabrear. Hay quien dice que son quejas de algunos vecinos, o de los ciclistas (por cierto, ¿las latas, los plásticos, los condones y los papeles que aparecen continuamente por Collserola no molestan a nadie? ¿Nadie multa a quien ensucia de esa manera la montaña?).
En cualquier caso, van a degüello y con intención de hacernos callar han enviado a su ejército uniformado para castigarnos e intimidarnos, multándonos. Se han producido casos delirantes, con una patrulla deteniendo el coche delante de un voluntario y esperando a que el perro acabase de hacer "sus cosas" para ver si le podían cascar una multa. ¿Realmente tan poca delincuencia hay en Barcelona que el Ayuntamiento puede permitirse el lujo de destinar una patrulla diaria para hacer la ronda por el camino al lado del CAAC? ¿Dónde estaba la guardia Urbana cuando un energúmeno agredió a una voluntaria e intentó arrebatarle un perro que estaba paseando?
Señores, no sabemos por qué se empeñan en subestimar el amor que sentimos por los animales abandonados por esta ciudad. Los voluntarios llevamos ya mucho dinero gastado en el CAAC, mucho tiempo y mucha energía. ¿Creen que ahora, por unas simples multas podrán conseguir que dejemos de pedir una vida digna para esos pobres animales? No señores, no. Pagamos impuestos, votamos y esto nos da derecho a exigir que la ciudad de Barcelona pague su deuda limpiando esa imagen de verde y ecologista de la que tanto presume.
Los Señores Urbanos, que tan necesarios serían para multar a esa persona que todas y todos conocemos bien y que incumple sistemáticamente los límites de velocidad en su todoterreno poniéndonos en peligro, o para garantizar la integridad de los voluntarios, en vez de eso se dedica a multar aleatoriamente a los voluntarios por motivos baladies. Los agentes no son más que brazos ejecutores de superiores obedientes. La cosa no va con ellos.
Ciento veinte euros por no recoger una caca y seiscientos por un bozal. Setecientos veinte euros que deberían quemar a quien los recauda porque no es justo operar de modo tan estricto en un camino rural cuando no se ofrece a los voluntarios ninguna otra alternativa. Bueno, hay otra que tal vez sea la que les gustaría: que dejemos de ir y ser testigos de todos los despropósitos del CAAC, y volver a culpabilizar a los voluntarios en este caso por su ausencia. "y falta de compromiso personal". Sin duda da más trabajo multar a los delincuentes de verdad que a los bobos que ocupan su tiempo preocupándose de los perros y gatos del CAAC.

Sin papeleras, sin recogedores, sin palas, sin bolsas, sin información ni apoyo de ningún tipo por parte de nadie del CAAC (todavía estamos esperando a que el Tècnic del Voluntariat avise oficialmente de que la Urbana está multando a voluntarios o que salga en defensa de nuestros derechos, ¿no es su papel informar y actuar como interlocutor con la administración? ¿Para qué sirve este señor que cobra 26.850€ al año si luego no hace nada de nada?)... sin una posibilidad real de peligro que lo justifique se considera como delincuente a quien no lleve un perro manso con bozal. Cuando todos dicen en público que los voluntarios merecen un monumento, por la espalda se les desprecia y se les cuelga del pecho una multa donde deberían haber una medalla.
Ni una cosa ni la otra, ni condecoraciones ni multas: ¡¡¡dignidad!!!

¿Y ésto cómo lo "recogemos"? ¿Sorbiendo con una pajita?




lunes, 3 de mayo de 2010

La Síndica de greuges de la Ciutat demana que li diguem que passa al CAAC


Assumpció Vilà Planas, nova Síndica de Greuges de Barcelona. Assumpció Vilà és la nova Síndica de Greuges de Barcelona en substitució de Pilar Malla, que el passat mes de novembre va finalitzar el seu mandat.
La nova síndica ha estat nomenada en el Plenari del Consell Municipal de divendres 30 d’abril a proposta de l’alcalde, Jordi Hereu, i el seu mandat s’allargarà durant cinc anys. Barcelona, 30 d’abril de 2010.

Síndica de Greuges de Barcelona

Ronda de Sant Pau 45, Barcelona 08015
Tel. 93 413 29 00
Fax: 93 413 29 10
Correu electrònic:
sindicadegreuges@bcn.cat
Horari d'atenció
Matins: de dilluns a divendres, de 9.30 a 13.30 h
Tardes:de dilluns a dijous, de 16.00 a 18.00 hi hores concertades
Horari d'estiu:Tots els matins de 9:00 a 14:00. i hores concertades
Bus 37, 120, 121, 20, 24, 64, 91
Metro L2 Sant Antoni L3 Poble sec

¿Quién puede presentar una queja?
Puede presentar una queja cualquier persona física o jurídica que considere que la Administración impide o dificulta el ejercicio legítimo de los derechos constitucionales. La Síndica de Greuges supervisa si los órganos y los servicios del Ayuntamiento han actuado correctamente, o bien si han cometido algún error o arbitrariedad.
Se puede presentar una queja después de haber reclamado en el órgano o servicio implicado y no haber obtenido respuesta o solución. También, cuando se considere que la respuesta no tiene una motivación suficiente, o bien se ha cometido un error o arbitrariedad en la aplicación de las normas legales.


Tan sencillo como dar los datos personales, exponer los hechos, la queja que se formula, la fecha precedida de Barcelona a y la firma. Se puede enviar por correo postal, por mail, personalmente y están obligados a contestar. Como la nueva síndica es experta en voluntariado esperemos que sea más sensible y operativa que la anterior.

domingo, 2 de mayo de 2010

Dudas razonables

Perdido entre las brumosas reuniones de una presunta Comissió de Millora del CAAC (que parece haberse evaporado sin pena ni gloria en el limbo de la burocracia, como sucedió con las precedentes comisiones de Seguiment y Qualitat) se ha encontrado durante estos últimos 6 meses un hipotético proyecto de mejora del CAAC que incluía como elemento estrella unas obras maravillosas, destinadas a convertir la vergonzosa perrera municipal en el Shangri-La de los animales de compañía. Desde ciertos círculos se ha defendido con gran entusiasmo (en ocasiones sorprendente) la realidad inmimente de estas obras, aún sin tener la más mínima garantía en firme de ello. Por nuestra parte, desde un principio el asunto nos olió a chamusquina, pero haciendo acopio de prudencia y paciencia preferimos continuar fieles a nuestra línea habitual de "esperar e informarnos", no fuera que se nos acusara de sabotear o "poner palos en las ruedas" al proyecto.

Hasta ahora, el único elemento tangible que conocemos son unos planos y unos documentos que ya de por si plantean numerosos interrogantes.
- En primer lugar, el comienzo de las obras: se habló en su momento y oficialmente se sigue manteniendo desde el Ajuntament de Barcelona la fecha de "antes del verano", "mayo/junio". Si tenemos en cuenta que el traspaso de competencias de la ASPB a Medi Ambient también era "seguro" que se haría durante el primer trimestre de 2010 y todavía no se ha producido (de hecho el CAAC está sin director desde enero), nos resulta difícil creer en fechas y plazos de cualquier tipo. ¿Es que nadie se ha dado cuenta de que ya estamos en mayo y no hay obras?
- El proyecto en si: las zonas marcadas con un 01 deberían ser los dos nuevos patios, que reemplazarían al actual. Pequeño problema: para hacer esos patios, los gatos se iban "en enero" a la "gatera de Montjuïc" (presunta gatera a la que en su momento dedicamos un post). Los gatos no se han ido (ni se irán, o eso parece). Por tanto, esos "patios" no pueden hacerse.
- Pero no solo los patios: el almacén, la "zona de voluntarios" (todo ello curiosamente ubicado DEBAJO de las lineas de alta tensión de la torre de FECSA ubicada en esa esquina, parece que nadie se ha dado cuenta de que construir debajo de una linea eléctrica plantea una serie de problemas legales), etc... Todo ello ocupado actualmente por la zona de gatos.
- Luego tenemos una supuesta rampa de acceso, una de las peticiones más ansiadas por todos (subir y bajar por las escaleras con los perros es aparte de agotador un riesgo constante de caídas). Lo curioso es que para hacer esta rampa, habría que derribar la escalera cuyos peldaños fueron totalmente renovados hace apenas pocos meses. Seremos generosos, y lo dejaremos como "interrogante" (aunque tendría gracia que una escalera que llevaba años siendo un peligro para la integridad física de animales y personas fuese destruida al poco de ser reparada).
- Las jaulas para los perros: según el proyecto, se pasaría de las 112 actuales a 67 jaulas, desmontables, reciclables, estupendas y fabulosas. Pero hay un "pequeño" problema: si tenemos en cuenta que en el CAAC pueden haber momentos en los que se acumulan hasta 140 perros, de los cuales casi 30 son GPP y no son fácilmente combinables entre si o con perros no-GPP, no hay un/a etólogo/a que pueda valorar adecuadamente el carácter de los perros y pueda decidir con criterio cuales pueden combinarse entre si en la misma jaula, hay que dejar jaulas disponibles para los perros nuevos que hasta que no son reconocidos y evaluados por las veterinarias no pueden tener contacto con otros perros (o esa es la teoría), y para aquellos que están en post-operatorio o con alguna enfermedad y tampoco pueden compartir jaula, si se sigue apostando por la actual política de "perros enjaulados" 23h y 40 minutos al día, los números no cuadran por ningún sitio.
- También habría que sumarle otras cuestiones. Se habla de jaulas, rampas,... pero hay otros aspectos igualmente graves y urgentes que requieren atención (salas de postoperatorio en condiciones, mejoras de las instalaciones del equipo veterinario, en muy mal estado desde hace años, etc...) que no se contemplan en el proyecto. ¿Tal vez porque "no se ven" y no saldrían en la foto? ¿O porque quien ha realizado este proyecto no ha contado en ningún momento con la opinión experta de las trabajadoras y trabajadores del CAAC (que conocen mejor que nadie qué habría que mejorar) antes de hacer el proyecto?
- Resulta asimismo curioso que el proyecto tenga fecha de noviembre de 2009, cuando la Comissió de Millores se empezó a reunir en diciembre: parece que el Ajuntament empieza las comisiones con los deberes hechos con mucha antelación (o con un as en la manga: el ajuntament presenta "su" proyecto y es lo que hay, no se da margen a presentar otras propuestas). O que la persona responsable del proyecto sea Elena Valls i Puigcorbé, colaboradora de Forgas Arquitectes, el mismo estudio que realizó el fallido proyecto de la perrera en el Parc de la Oreneta (probablemente no sea más que una simple coincidencia, pero se admiten apuestas para ver si la "futura" gossera en Montjuïc también la harán ellos).
- Para llevar a cabo un proyecto de esta magnitud (se habla de un coste de las obras de 500.000 €) debería existir un presupuesto oficial, consensuado, votado y aprobado al menos por la mayoría de los partidos políticos tanto del ajuntament como de la oposición. No nos consta que tal cosa haya sucedido. Tampoco parece claro quién pondría el dinero para estas hipotéticas obras: ¿la Agència de Salut Pública, que lleva años y años sin hacer nada va a gastarse dinero ahora que teóricamente cederá las competencias a Medi Ambient? Parece poco probable. ¿Medi Ambient? Esa es la teoría, pero parece poco creíble a corto plazo, porque entre otras cosas no puede financiar unas obras de un centro que no gestiona y que sigue siendo de Salut Pública hasta nueva orden.
- Está claro que no poseemos todas las informaciones y hay algo que se nos escapa. Puede que el Ayto. nos sorprenda algún día con la buena noticia de que por fin empiezan las obras... y también puede que no.

Seguimos esperando. Seremos los segundos en alegrarnos si todas nuestras dudas resultan infundadas y las obras se llevan finalmente a cabo (los primeros serán obviamente los animales que merecen unas condiciones dignas en el CAAC... por cierto, ¿hemos dicho que en el proyecto tampoco se explica dónde se ubicarán temporalmente los animales mientras duren las obras?).


sábado, 1 de mayo de 2010

Carta abierta

Publicamos un escrito que hemos recibido, y que refleja experiencias y sensaciones que muchas y muchos compartimos a diario en el CAAC.
(Versión bilingüe, para que nadie se quede sin enterarse).

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"DE QUI ÉS AQUESTA MERDA?
Avui passejava tranquilament pel camí que voreja el CAAC de Barcelona. El CAAC és el Centre d’Acollida d’Animals de Companyia, la gossera, per entendre’ns. En sóc voluntària; sí nois, passejo gossos. Qui ho trobi una animalada, que no es molesti en seguir llegint, que encara acabaríem discutint… Què voleu? Cadascú té les seves aficions i preferències.
No penseu pas que és una tasca senzilla això de ser voluntari al CAAC. Hauria de ser-ho, perquè els pobres animalons no es queixen pas, i es porten la mar de bé. Només demanen alguna moixaina i que estiguin una miqueta per ells, almenys durant els vint minutets diaris en què algú els treu del seu metre quadrat de gàbia. Tampoc no és demanar tant… si tenim en compte que aquest metre (o poc més) quadrat és sufocant a l’estiu i humit i gèlid a l’hivern. Si un humà fes l’experiment de viure durant 24 hores tal i com viu un gos del CAAC, l’endemà segurament l’haurien d’ingressar a Sant Boi, a menys que tingués una fortalesa mental fora de sèrie, humanament parlant. Segurament la seva ment li faria creure que està vivint en un camp de concentració nazi.
Doncs com deia, jo només pretenc passejar una mica amb els gossos abandonats, però sembla que alguna mena de maledicció m’ho vol impedir. Si fós supersticiosa, pensaria realment que alguna estranya conjunció del astres afecta a la gossera d’aquesta ciutat i aniria a veure el millor astròleg per fer-li una consulta. Però és que no ho sóc.
També he arribat a pensar que la inestabilitat climàtica d’aquesta època de l’any pugui portar energies que afectin negativament a les activitats realitzades a l’aire lliure en determinades zones… perdó, em sembla que m’estic embolicant massa. A més a més, sospito que els amics Picó i Molina ho podrien trobar una mica descabellat.
Una altra hipòtesi ronda la idea que algú –amb alguna malèvola intenció- pretén minar la tasca dels voluntaris del CAAC. Però això és impensable! Els nostres polítics hi són per defensar els nostres drets i, per damunt de tot, pensen en el nostre benestar, de forma entregada i generosa. Per altra banda, estan clarament preocupats perquè aquesta digna i estimada ciutat tingui uns equipaments també dignes, entre ells una gossera digna, a l’alçada de la seva pròpia dignitat com a polítics i com a persones.
Us preguntareu què és el que patim els voluntaris del CAAC, a més a més del fet de veure cada dia animals patint? Doncs aquí en teniu alguns exemples:
Multes de 300 i de 600 euros a diversos voluntaris per portar sense morrió algun gos més manso que Winnie the Pooh.
Multes de 120 euros a voluntaris per no recollir una defecació líquida en una zona rural on la distancia entre contenidors es pot mesurar en anys-llum.
Assetjament a alguns voluntaris per part de l’anomenat “tècnic del voluntariat” (no he trobat cap significat de la paraula “tècnic” al diccionari de l’Institut d’Estudis Catalans que s’acosti ni remotament al significat d’assetjador).
Una pila de cartes amenaçadores a voluntaris que han exercit el seu dret a expressar-se lliurement, anomenant algunes de les coses que no funcionen del tot bé al CAAC. Potser provenien d’algú que ha vist moltes películes sobre la màfia italiana, oi?
Una agressió física per part d’un personatge que pretenia recuperar el seu gos, creient que la forma correcta de fer-ho era a l’estil “rambo” (un altre que veu molt cinema), sense que ningú s’immuti, fora dels voluntaris.
Qualsevol ciutadà tindria dret en aquests casos a que la justícia li prestés un mínim d’atenció. Però què hem de fer quan és justament la justícia qui envia els seus cavallers (en cotxes de la digna guàrdia urbana d’aquesta digna ciutat) perquè imposi els seus capricis arbitraris, atenent-se a les lleis només quan els ve de gust i ho consideren oportú i prescindint-ne quan els convé?
I jo que segueixo barrinant: si ni els astres, ni el mal temps, ni els voluntariosos polítics no són responsables de les desgràcies del CAAC, on hem d’anar a buscar aquesta responsabilitat?
Perdoneu-me, però encara no ho entenc! La merda que cal recollir és només la dels gossos?"

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"¿DE QUIÉN ES ESTA MIERDA?
Esta mañana paseaba yo tranquilamente por el camino que bordea el CAAC de Barcelona. El CAAC es el Centro de Acogida de Animales de Compañía, la perrera, para entendernos. Soy voluntaria en ese centro. Pues sí, paseo perros. A quien esto le parezca una barbaridad hará mejor en no seguir leyendo; podríamos acabar discutiendo por ello. Cada cual tiene sus aficiones y sus preferencias.
No creáis que ser voluntario del CAAC es una tarea sencilla. Debería serlo, porque los pobres animalitos no se quejan y se portan la mar de bien. Sólo piden algunos mimos y que se les haga un poquito de caso, por lo menos en los veinte minutos diarios durante los cuales alguien los saca de su metro cuadrado de jaula. Y eso no es mucho pedir… si tenemos en cuenta que ese metro (o poco más) cuadrado es sofocante en verano y húmedo y frío en invierno. Si un humano hiciera el experimento de pasar 24 horas viviendo tal y como vive un perro del CAAC, al día siguiente habría que ingresarlo en Sant Boi, a menos que tuviera una fortaleza mental fuera de serie, humanamente hablando. Seguramente su propia mente le haría creer que se encuentra en un campo de concentración nazi.
Pues como iba diciendo, yo sólo pretendo pasear un poco a los perritos abandonados, pero parece ser que alguna extraña maldición pretende impedirlo. Si fuera supersticiosa, quizá pensaría que alguna peculiar conjunción de los astros afecta a la perrera de esta ciudad y acudiría rápidamente a consultar al mejor astrólogo. Pero no lo soy.
También he llegado a pensar que la inestabilidad climática de esta época del año pudiera traer energías que tuvieran una influencia negativa sobre las actividades realizadas al aire libre en determinadas zonas… perdón, creo que me estoy liando. Además sospecho que los amigos Picó y Molina considerarían algo descabellada esta hipótesis.
Otra posibilidad es que alguien–con maléfica intención- pretenda minar la tarea de los voluntarios del CAAC. ¡Pero eso es absurdo! Nuestros políticos defienden con fervor nuestros derechos y, por encima de todo, velan por nuestro bienestar, de forma entregada y generosa. Por otro lado, tienen una clara preocupación e intención de dar a nuestra digna y querida ciudad unos equipamientos también dignos, entre ellos una perrera digna, a la altura de su propia dignidad como políticos y como personas.
¿Os preguntaréis qué es lo que soportamos los voluntarios del CAAC, además del hecho de ver animales que sufren a diario? Pongamos algunos ejemplos:
Multas de 300 i de 600 euros a varios voluntarios por llevar sin bozal algún perro más manso que Winnie the Pooh.
Multas de 120 euros a voluntarios por no recoger una defecación líquida en una zona rural donde la distancia entre contenedores puede medirse en años luz.
Acoso a algunos voluntarios por parte del denominado “técnico del voluntariado” (no he encontrado un solo significado de la palabra “técnico” en el diccionario de la Real Academia Española que se acerque remotamente al significado de acosador).
Un montón de amenazadoras cartas a voluntarios que, ejerciendo su derecho a expresarse libremente, han osado hablar sobre algunos aspectos que deberían mejorar en el CAAC. ¿Será que el autor o la autora de estas cartas ha visto muchas películas sobre la mafia italiana?
Una agresión física por parte de un personaje que pretendía recuperar a su perro, considerando que la forma correcta de hacerlo era al estilo “rambo” (otro que ha visto muchas películas), sin que nadie se inmute, aparte de los voluntarios.
Cualquier ciudadano tendría derecho en estos casos a pedir a la justicia que le preste un mínimo de atención. Pero ¿qué debemos hacer cuando es la misma justicia la que envía a sus caballeros (en coches de la digna guardia urbana de esta digna ciudad) para que imponga sus caprichos arbitrarios, ateniéndose solamente a las leyes cuando le conviene y lo considera oportuno, y prescindiendo de ella cuando le place?
Y yo sigo pensando: si ni los astros, ni el mal tiempo, ni los entregados políticos son responsables de les desgracias que caen sobre el CAAC, ¿dónde debemos buscar esa responsabilidad?
Perdonadme, pero ¡todavía no lo he entiendo! ¿La mierda que hay que recoger es únicamente la de los perros?