Los cierres de las puertas que se rompen no es la única chapuza, desgraciadamente. Por ejemplo los "patios". ¿Patios? Bueno, en realidad solo hay uno. El espacio que supuestamente debía ser el patio "grande" es una zona absurda, inútil e inservible... porque no tiene puertas. Veamos primero el patio que sí funciona (tiene puertas, vaya):
La puerta debe bloquearse con una correa,porque sino los perros la pueden abrir y escaparse.
La valla metálica es de tan mala calidad, que tardó poco en romperse.Los perros podían sacar la cabeza... o todo el cuerpo,
y directamente escaparse por la zona de jaulas.
¿La solución al problema? Aprovechar restos de puertas o trozos de jaulas antiguas y atarlas con alambres a la valla, para por lo menos intentar que los perros no se escapen...
El presunto segundo patio es una zona fantasma, que no sirve para nada. Un patio pierde su razón de ser (poder tener un lugar en el que los animales puedan ir sueltos), si NO HAY PUERTAS.
Dedicar todo este espacio para ubicar una tapa de alcantarilla, se nos antoja excesivo. Continuará...
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